Soy de nubes de algodón cuando me besas y soy de acero cuando me lastimas.
Soy la primavera que llega,cuando el invierno roza tus pies.
Soy blanco, azul, amarillo, soy rosa, verde, negro, soy de todos los colores y de ninguno.
Soy el silencio de mis gritos y la voz de mi secreto.
Soy la pereza de tus brazos y el alivio de mi escondite.
Soy mujer, hombre, niña, soy anciano, niño y madre. Soy la razón de estos versos escritos con alma. Soy la lluvia que cae cuando el sol más calienta y soy la brisa que sopla cuando el viento se ha ido.
Soy lágrima y sonrisa, soy adorno y sombrero de tu cintura.
Soy ágil y pesada. Soy diamente y esmeralda.
Soy un perro, un gato, una gallina. Soy árabe, española y gitana.
Soy romántica de lo divino y escéptica matemática.
Soy la canción de aquel concierto, la mirada olvidada de tu juego.
Soy los lunares de tu espalda y las cicatrices de tus mentiras.
Soy la poesía de la luna, soy la luz de las estrellas.
Soy amiga, hija, novia, soy compañera, nieta, sobrina. Soy prima, vecina, conocida. Soy una más y una menos en este lugar.
Soy el baile de la orquesta, soy la voz de mi corazón.
Soy aceituna de tu ensalada, soy el regaño de los descuidos.
Soy el dulce beso de tus mañanas y soy el abrazo sincero de la noche.
Soy la cara amable cuando sonrío y soy el reflejo de la furia cuando enfando.
Soy el disfraz de nuestra magia y la hipérbole de tu derivada.
Soy alegre, sensible, rebelde. Soy la locura de lo infinito y la lengua de tus tatuajes.
Soy así, cómo NO me ves.
Soy así, como quiero ser.